1. Verificar: Verifique si el embalaje interior y exterior de la ropa protectora ignífuga, todos los letreros de marcas registradas y los letreros de seguridad de los productos especiales de protección laboral están completos y correctos, y si existen instrucciones de lavado, mantenimiento y mantenimiento.
2. Mirar: comprobar el aspecto de la ropa protectora ignífuga. La superficie debe estar libre de defectos, daños y defectos de costura. La estructura de la ropa de trabajo ignífuga debe tener escote, puños y dobladillo ajustados para evitar que objetos calientes o chispas salpiquen y dañen el cuerpo humano. El bolsillo expuesto debe tener una tapa para evitar que se recojan salpicaduras de metal o chispas. Los orificios de ventilación reservados para la disipación del calor deben estar en las axilas, la espalda y el interior de la entrepierna para evitar la entrada de objetos extraños.
3. Tacto: La ropa protectora ignífuga de mejor calidad se siente más suave al tacto y no irrita la piel.
4. Olor: algunos retardantes de llama no calificados tienen cierta toxicidad y cierto olor acre. Saque la ropa protectora ignífuga del paquete y huela, no debe haber ningún olor peculiar ni acre.
5. Pruebe: Primero, pruebe las bolsas y adornos de la ropa protectora ignífuga, que no deberían afectar el trabajo normal; En segundo lugar, pruebe si es conveniente, rápido y desmontable.